Muchos son los que desconfían de las pesas como un método para mejorar la salud, y es que a lo largo de muchos años se las ha visto como un enemigo, un esfuerzo excesivo que los únicos efectos que nos proporcionaba era un excesivo desgaste de nuestras articulaciones así como un endurecimiento y pérdida de la flexibilidad sin contar con otras muchas más creencias relacionadas con problemas cardiovasculares.
Y es que las últimas investigaciones han determinado que las pesas son una buena forma de entrenar y mejorar nuestra salud en muchos casos. Además de desmentir los antiguos mitos acerca de este entrenamiento.
La antigua creencia que se tenía del entrenamiento con pesas era que es un ejercicio en el que la frecuencia varía, pues se producen altos y bajos en el ritmo cardíaco, ya que se acelera mientras realizamos los levantamientos y se ralentiza al descansar porque nuestro cuerpo se recupera del esfuerzo realizado.
Actualmente esta idea ha cambiado y se ha demostrado que el entrenamiento con pesas es un aliado ya que no solamente ayuda a que los músculos se fortalezcan, incluido el corazón, sino que también reduce el colesterol en sangre. Un efecto que se puede acentuar si las combinamos con ejercicios aeróbicos, estiramientos y una buena dieta.
El entrenamiento con pesas también puede ser un buen aliado para luchar contra la diabetes, un trastorno producido por un mal funcionamiento de la insulina de nuestro cuerpo. Este desorden tiene muchos riesgos genéticos, pero también el estilo de vida tiene mucho que ver, ya que si combinamos la obesidad con el sedentarismo y el consumo de azúcares y grasas excesivo estaremos produciendo una resistencia a la insulina.
Si seguimos una rutina de adelgazamiento basada en ejercicios con pesas y una buena dieta podemos evitar en gran medida la diabetes y activar la producción de insulina de nuestro cuerpo. Es una buena medida de prevención, pues no debemos olvidar que el ejercicio con pesas quema calorías y activa a nuestro metabolismo basal para que siga consumiendo energía una vez hayamos dejado de hacer el ejercicio.
Estos son algunos de los motivos por los que el entrenamiento con pesas no es solamente algo que se hace por estética para desarrollar más musculatura, sino que puede ser un buen aliado siempre y cuando lo realicemos correctamente y en su justa medida, ya que no debemos sobre-entrenar nunca ya que podríamos lesionarnos.