La serendipia se describe normalmente como el proceso accidental e inesperado por el cual descubrimos algo que en realidad no estábamos buscando. Podríamos pensar que la serendipia es pura suerte. No es tan simple en este caso, ya que son muchos los autores que consideran que hay algo más detrás de todo el proceso.
La noción del verdadero significado de la serendipia está más ligada a numerosos descubrimientos realizados en el mundo científico, que si bien podría pensarse se produjeron por casualidad, no es menos cierto que se dieron gracias a que sus autores se encontraban atentos y abiertos a lo inesperado (aunque buscasen otra cosa). Se trata, por lo tanto, de un proceso activo, no pasivo.
Existen infinidad de ejemplos al respecto, como el descubrimiento de América por parte de Cristóbal Colón (quien en realidad pretendía encontrar una ruta hacia las Indias por el oeste); el famoso episodio de Newton con la manzana; o, por ejemplo, la invención del velcro por parte del ingeniero Georges de Mestral, al tratar de tener que quitarle a su perro los cardos que se le enredaban al pelo después de ir a pasear.
En una Internet cada vez más sobresaturada de contenidos, los sistemas de los que nos valemos para acceder a la información están orientados a servirnos sólo para aquello que hemos declarado que nos interesa, aislándonos de lo que hay más allá. Lo malo de esto es que nos impide llegar a contenidos o productos que desconocemos y que podrían resultarnos muy interesantes. Es por ello que en la actualidad hay mucho interés en enriquecer los sistemas de recomendación y de recuperación de información con elementos que permitan favorecer el descubrimiento inesperado y, por lo tanto, el consumo de contenidos y productos que nos puedan sorprender.
Amor serendipia
El amor serendipia ocurre cuando aparece alguien, te gusta y no lo estabas buscando. Lo primero que hay que entender es que el deseo de encontrar a alguien con quien compartir tu vida, simplemente porque te sientes sola/solo o porque algún tipo de presión te genera esa necesidad, hace que las relaciones no sean sanas y no se construyan sobre una base positiva. Siempre es muy lindo encontrar el amor y querer a alguien, pero no partiendo de una necesidad, una situación que se da muy a menudo tras una ruptura.
Está comprobado que el amor serendipia es el más duradero. Esto sucede porque establece relaciones más satisfactorias cuando las personas están relajadas y más receptivas ante un impulso que no buscan por necesidad ni aburrimiento. Al aparecer en un contexto en el que no lo están buscando, es probable que se construya desde una base más estable.
Es por eso que hay que diversificar el pensamiento y transitar varios caminos. Te invito a vivir la experiencia serendipia. ¿Te animas?