Con la llegada del mes cinco se puede decir que estamos en casi la mitad del año. Qué siente nuestro cuerpo al llegar a la mitad del camino, después de seis meses de trabajo intenso, que solo admite pequeños recreos.
La Maca está aquí
Tanto física como mentalmente padecemos el año, aunque hagamos lo que amamos, es inevitable pensar que tal vez no damos mas. En esta nota un pequeño tip, una receta milenaria de nuestros ancestros latinoamericanos que pareciera es infalible para cargarnos de energía naturalmente, la maca.
La maca es una raíz peruana que se cultiva a más de dos mil metros de altura y pareciera tener poderes milagrosos. Es una raíz que da energía natural al cuerpo, sirve para el desarrollo óseo de los niños, aporta calcio, favorece la concentración, combate la hipertensión y, además, aporta potencia sexual. Se puede consumir en yogures, guisos, jugos, sopas. Se la puede agregar a cualquier infusión e incluso a un vaso con agua. No modifica considerablemente el sabor de las comidas, ni tiene un gusto desagradable.
Se dice que ya antes de la llegada de los españoles a América del Sur, los Incas consumían esta raíz que concentrada con otras sustancias tenía poderes alucinógenos. Los Incas bebían mezclas de hojas de coca, chicha (alcohol de maíz) fermentada durante años, frutas del desierto y maca. En la época de febrero y marzo los hombres la consumían para poder embarazar a sus mujeres.
Una receta de la abuela con más de 500 años que hoy se consigue en dietéticas y lugares especializados que nos puede ayudar a afrontar lo que queda del año. Una forma natural de sobrellevar esta primera mitad de año que ya nos tiene al borde del desmayo.
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