Según un estudio realizado por Forbes, en 2024 y con más de 2.5 millones de usuarios accediendo a exchanges globales, Argentina registra la mayor tasa de adopción cripto en la región, principalmente como refugio a la inflación del 276 % que registra el país en lo que va del año. Esto ha llevado a los argentinos a buscar alternativas para proteger sus ahorros de la devaluación del peso (ARS), teniendo a las criptomonedas como una opción de inversión.
En este contexto, los usuarios de TruBit, el ecosistema de criptomonedas más completo en América Latina, en Argentina han mostrado preferencias claras en sus intercambios de criptomonedas: un 60% de ellos opta por cambiar pesos argentinos por USDT, una stablecoin vinculada al dólar estadounidense, como medida para preservar el valor de su dinero frente a la inflación. Este comportamiento refleja la falta de confianza en la estabilidad del ARS y la búsqueda de una reserva de valor más segura.

Además, un 20% de los usuarios prefiere nARS, una stablecoin respaldada tanto por pesos argentinos como por stablecoins de dólar, que permite a los usuarios mantener su exposición a la moneda local, pero con la ventaja de la estabilidad que ofrecen las criptomonedas y la facilidad de intercambiarlo por otros activos virtuales. nARS se ha convertido en una herramienta crucial para aquellos que desean minimizar el riesgo cambiario sin perder el vínculo con el peso argentino.
Por otro lado, un 10% de los usuarios decide cambiar sus ARS por Bitcoin, una criptomoneda conocida por su volatilidad pero también por su potencial de apreciación a largo plazo. Este grupo de usuarios parece estar dispuesto a asumir mayores riesgos a cambio de la posibilidad de obtener ganancias significativas. El restante 10% diversifica su portafolio con otras criptomonedas, reflejando una variedad de estrategias de inversión dentro del ecosistema cripto en Argentina.
La creciente adopción de criptomonedas en Argentina no solo es un testimonio de la necesidad de protegerse contra la inflación, sino también de la creciente aceptación de las criptomonedas como una alternativa viable a los sistemas financieros tradicionales. Este fenómeno es particularmente relevante en un país donde la confianza en la moneda nacional es extremadamente baja y donde las políticas económicas han llevado a una búsqueda activa de alternativas financieras.
Un estudio privado, en tanto, destaca que el Bitcoin y las monedas estables (stablecoins) dominan el comportamiento de compra de los mercados de América Latina. De hecho, el 38% de las criptomonedas adquiridas durante el segundo semestre de 2023 corresponden a Bitcoin y el 30%, a dólares digitales.
Esta tendencia regional, como anticipamos, no se refleja en nuestro país ya que Argentina es el único de la región donde más de la mitad de las compras son de dólares cripto, superando a Bitcoin, al aportar el 60% y el 13%, respectivamente del total de compras. Este comportamiento, más vinculado a la protección del patrimonio que a la inversión, puede explicarse por la constante devaluación del peso y el incremento de la inflación.
Con un gobierno cada vez más abierto al mundo cripto, tal cual lo expresado por el presidente Javier Milei, Argentina sigue explorando nuevas formas de integrar estos activos digitales en su economía, lo que podría servir como modelo para otros países en situaciones económicas similares.
Sin dudas el papel de las criptomonedas en la economía argentina continuará evolucionando, acelerando la transición hacia un sistema financiero más digital y descentralizado.
Matias Reyes, Country Manager de Trubit Argentina.