Están de moda
Son furor en todo el mundo. Niños, adultos, mascotas, famosos, jugadores de fútbol, modelos con poca ropa, artistas, y la lista puede continuar eternamente.
Ellen DeGeneres en la gala de los Oscars, el presidente Barack Obama con el jugador de béisbol David Ortiz, los actores de “Modern Family” durante una grabación, Demi Lovato, Nicki Minaj, Kelly Osbourne, Justin Bieber frente al espejo, James Franco, Miley Cyrus, Cristiano Ronaldo y muchos más.
Las fotos “selfie o selfy” son una autofoto. Un autorretrato realizado con una cámara digital o con un celular que, si bien está muy de moda hoy en día gracias a la gran cantidad de redes sociales (Twitter, Facebook, Instagram, etc) en la cual uno puede compartir con amigos y desconocidos sus fotos, no es algo nuevo.
En 1839, Robert Cornelius, pionero de la fotografía, realizó el primer autorretrato fotográfico de la historia. Era una “selfie” de él mismo mirando seriamente a la cámara, con los brazos cruzados y el pelo despeinado. Detrás de la foto escribió: “La primer fotografía lumínica jamás tomada”. Y tenía razón. La primera de millones.
Con el descubrimiento de la cámara de cajón portátil, como la Kodak Brownie en 1900, comenzó a popularizarse la práctica de la autofoto. Sin embargo, a diferencia de hoy -donde sacarse una foto “selfie” es tan sencillo como contar hasta dos-, antes se necesitaba la ayuda de un espejo, un trípode y un visor situado en la parte superior de la cámara para poder sacar la foto. Las cámaras de cajón tenían formas de cajas, por eso su nombre, y un tamaño y peso considerable. Nada que ver con los celulares modernos que son cada vez más chiquitos y livianos.
Si en 1914, la duquesa Anastasia Nikoláyevna de Rusia, hija del último zar de la Rusia Imperial, hubiese tenido a su alcance uno de los teléfonos móviles de hoy en día, no hubiese sufrido tanto al realizar su autorretrato fotográfico a su corta edad de 13 años: “Hice esta fotografía yo misma mirándome al espejo. Fue muy difícil ya que mis manos estaban temblando”, escribió junto a la foto.
Muchos famosos han caído en el juego y diariamente suben fotos “selfie” de ellos en todas las redes sociales y canales de comunicación habidos y por haber. Los fans están encantados. ¿Quién tenía antes la posibilidad de ver a Madonna sin maquillaje y de entre casa? ¿A quién no le intriga ver una foto de Shakira y Piqué en su mansión mirando una película? ¿Cómo no llamarnos la atención Heidi Klum, Gwyneth Paltrow y Lupita Nyong’o al natural? ¿Paris Hilton semi desnuda frente a un espejo? Meterse un poco en la vida cotidiana de gente que parece tan lejana y utópica, despierta pasiones.
Un estudio realizado por el Instituto Tecnológico de Georgia y Yahoo Labs, comprobó que las “selfie” son las imágenes más populares en Instagram. Ese mismo estudio también concluyó que las fotos con niños o adolescentes son más populares que la de los adultos. A su vez, la palabra “selfie” fue elegida como PALABRA DEL AÑO 2013 por el Diccionario Oxford, uno de los diccionarios más completos de la lengua inglesa. Su práctica sigue vigente y en aumento… ¿por lo que podría llegar a ser también la palabra del año en el 2014?
“No hay nada en el mundo que pueda compararse con un rostro humano. Es una tierra que uno no se cansa jamás de explorar, un paisaje de una belleza única”, decía Carl Theodor Dreyer. Las fotos “selfie” exponen nuestros rostros, demuestran una lindura diferente y un ángulo desconocido, y es por eso que nos atraen y llaman tanto la atención.