Las noticias acerca del cambio climático son cada vez más frecuentes, pues los efectos de la contaminación, entre otros factores, se hacen sentir cada vez más en todas las regiones del planeta.
Es fácil sentirse impotente ante esta problemática y preguntarse si uno puede ayudar de alguna forma, después de todo, el planeta Tierra es nuestro único hogar.
Y, aunque la contaminación depende en grandísima medida de las actividades industriales, cada ser humano puede esforzarse en llevar un estilo de vida más sostenible.
Piensa esto: Si somos 8 mil millones de seres humanos en el planeta y, cada uno de nosotros implementa acciones sostenibles en su cotidianidad, es seguro que podremos lograr un impacto positivo.
Por lo que vamos a enumerarte algunas de las medidas que puedes comenzar a implementar para que tu estilo de vida sea más sostenible.
Cuida la energía
Procura que tus espacios puedan recibir la mayor cantidad de iluminación natural.
Muchas veces tenemos las cortinas y las persianas cerradas y, dentro de casa, todas las luces encendidas.
Se nos olvida que afuera tenemos una extraordinaria fuente de luz solar y que bastará con que le permitamos pasar a casa para poder apagar todas las luces artificiales.
La instalación de paneles solares es otra buena idea. Puedes dejarlos expuestos al sol durante todo el día y usarlos durante las noches.
También procura elegir electrodomésticos etiquetados en la categoría A en la escala de eficiencia energética y de reparar cualquier falla eléctrica que tengas en casa.
Estas medidas, no solo cuidarán al planeta, sino que también te ayudarán a pagar una factura eléctrica más económica.
Compra alimentos y productos a granel
Hay granos, frutas, verduras, entre otros alimentos, que puedes comprar a granel en muchas tiendas. Todo es cuestión de informarse acerca de cuáles comercios cercanos a ti venden alimentos en esta presentación.
También puedes comprar productos de limpieza y aseo personal. Por lo general, quienes venden este tipo de productos bajo esta modalidad, almacenan el detergente, el cloro, etc. en grandes recipientes.
Así que solo deberás llevar tus propios envases para obtener en estos la cantidad deseada. Una vez se acabe el producto, volverás a llevar el mismo envase para recargarlo, por lo que podrás utilizarlo una y otra vez y disminuir una enorme cantidad de desechos plásticos.
Dile sí a la reparación
La frase “Reparar es un acto de Rebeldía” es para meditarla largamente, sobre todo, en esta era de consumo desenfrenado.
Muchas veces, apenas se nos estropea algo, pensamos que hay que tirarlo y reemplazarlo por uno nuevo, pero ¿Qué hay de reparar?
Antes de tirar aquello que se te ha roto, procura buscarle una solución y repararlo por tu cuenta.
En YouTube hay cientos de tutoriales para aprender a reparar cualquier cosa. Posiblemente, en un par de horas y con la orientación de algún YouTuber, ya tengas funcionando nuevamente eso que habías pensado desechar.
Y, si no te animas a intentar repararlo por ti mismo porque no tienes tiempo u otra razón, llévalo a alguna persona que sepa hacerlo. Si hay que tirarlo, te lo dirán, pero al menos habrás hecho el intento.
Sácale provecho a lo digital
Si hay un punto a favor en esta era global y digitalizada es que el ahorro de papel es cada vez más sencillo.
¿Necesitas una factura? Solicita que te la envíen a tu correo electrónico; ¿Necesitas tomar notas? Usa una aplicación en tu móvil o computadora.
Si es imprescindible imprimir algo, procura utilizar la hoja por ambas caras y, dale siempre un uso a aquellas hojas que vas a desechar. También trata de reciclarlas siempre que sea posible.
En Ridyn hemos comenzado a implementar cada una de estas medidas, ya que nos sentimos cada vez más comprometidos con el medio ambiente.
¿Conoces algunas otras pautas para llevar un estilo de vida sostenible?
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