Nuestra botella en el Universo
Si decidimos arrojar un mensaje dentro de una botella al mar, ¿Qué deseamos lograr? Enviar un mensaje y este, lo elegimos con mucho cuidado. Escribimos el mensaje, queriendo expresar nuestros deseos, pensamientos o información, y lo arrojamos sabiendo que es escasa la posibilidad de que alguien lo encuentre y pueda leerlo.
Tomando como base el hecho de enviar un mensaje sin saber el destinatario, y el grano de arena en una playa que representa nuestra botella, implementamos esto mismo a grandes rasgos y con una finalidad más profunda. El Disco de oro de las Voyager (“The Sounds of Earth” – Sonidos de la Tierra) fue creado en el año 1977, y es un disco de gramófono, encargado de ser el “mensaje” de nuestro planeta Tierra a las posibles civilizaciones capaces de viajar por el espacio. Este disco acompaña a las sondas espaciales Voyager (una suerte de satélite espacial) que se envió al espacio con contenidos específicos y variados de la Tierra; saludos en 55 idiomas, imágenes simbolizando, describiendo y representando nuestro planeta y nuestra forma de vida y manera de realizar nuestras acciones, música de diferentes artistas y músicos, sonidos propios de la Naturaleza, lluvia, código morse, viento, signos vitales y demás. El contenido fue bajo la aprobación de la NASA, siendo la encargada, junto a Carl Sagan, de elegir el contenido del mensaje.
En la actualidad, el disco se encuentra aproximadamente a unos 13.800 millones de kilómetros de la Tierra, logrando, al pasar los kilómetros, sobrevolar los cuatro planetas gigantes (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno) viajando a una velocidad de 56.000 kilómetros por hora.
Si bien la finalidad del mensaje interestelar es la comunicación con seres extraterrestres o posibles civilizaciones en el espacio, a nivel humano, y considerando las mínimas probabilidades de que sea encontrado el disco, se llega a una de las conclusiones que The Voyager es más bien una representación que simboliza nuestro deseo en común humano de poder demostrar nuestro progreso, culturas, historia, Naturaleza y civilización que poseemos, habitamos y vivimos día a día personas habitantes de este hermoso planeta. Aprender, de ser encontrado nuestro mensaje, de civilizaciones con tecnologías mucho más avanzadas, conocimientos inimaginables y el poder saber, quizás, la verdad sobre nuestra Creación y Destino, las respuestas de todos nuestros porqués y el apasionante anhelo de confirmar frente a los ojos de la Humanidad que no estamos solos en el eterno Universo.