Hace una semana, leí un reporte de CNN En Expansión, sobre el caso Kodak, la multinacional dedicada al sector de la fotografía. Esta empresa fue por muchos años dominante en esta industria, pero el miedo de hacer algo diferente le impidió ver que la fotografía digital era el negocio del siglo. La empresa bajó sus ventas; la gente comenzó hacer más uso de las cámaras digitales y menos uso de los tradicionales rollos de películas Kodak, de la tinta, el papel y la impresión. En el 2012 la empresa se declaró en bancarrota.
La necesidad de reinventarse tras los años es vital, no se puede seguir haciendo lo mismo y ver que ya no vendes como antes o que como profesional ya no te emplean tanto como antes.
Toda organización pequeña o grande desea sobresalir y mostrarse positivamente diferente ante sus clientes y competidores; para lograrlo, innovar es la clave. Yerai Lorenzo, un consultor de innovación y fundador de la firma Ynnovatio, escribió un artículo dónde explicó 7 mitos sobre la innovación, el tercer mito se refería a cómo el público asocia innovación con tecnología, «innovación sinónimo de tecnología», claramente esto es un mito, se puede innovar sin tecnología.
La innovación, en sí, es hacer algo nuevo; puede ser un nuevo proceso o mejorar un servicio o producto. No se necesita una gran suma de dinero para comenzar a mejorar e innovar. Más que el dinero, se necesita un ambiente que promueva la innovación. La innovación puede ser algo tan simple como la (re)invención de un menú de restaurante, la calidad de un producto, la comunicación con el cliente o el reparto de productos a domicilio por parte de un supermercado.
Las empresas más competitivas del mundo innovan constantemente en todas sus áreas: procesos, productos, servicios, formas de organización, fuentes de insumos, entrenamiento a los empleados, mercadeo, publicidad y otros.
Un estudio titulado «El emprendimiento en América Latina: muchas empresas y poca innovación», que realizó el Banco Mundial, reveló un gran déficit de innovación por parte del sector privado y público en Latinoamérica. En muchos casos, la carencia de innovación es una de las razones por las cuales muchas empresas no crecen y otras simplemente desaparecen.
Las empresas necesitan innovar continuamente para crecer o sobrevivir. Joseph Schumpeter, un destacado economista austro-estadounidense, entendió la innovación como una de las causas de desarrollo económico, a tal punto que fue él quien introdujo el concepto de innovación y su relación con el progreso económico. En su Teoría de las innovaciones, él definió la innovación como el establecimiento de una nueva función de producción. La economía y la sociedad cambian cuando los factores de producción se combinan de una manera novedosa.
Todos tenemos un reto de superación personal y económica con nosotros mismos, como talento de una organización, una sociedad o un país. Nuestra nuestra capacidad de innovación va a permitir que las organizaciones donde trabajemos puedan interactuar en un mundo cada vez más dinámico y competitivo. Si impulsamos innovación en nuestro entorno y fomentamos una cultura de cambio, lograremos no solo impactar a nuestros clientes o consumidores, sino también al país donde vivimos.