Estas fueron las palabras que utilizó el relator de Radio Revolución (Argentina) Alberto Raimundi, en contra del delantero colombiano Teo Gutiérrez tras convertir un gol para River, en el marco de la primera fecha de una nueva edición del torneo de fútbol profesional argentino.
El “polémico” relator, hincha de Gimnasia y Esgrima de La Plata, generó todo un malestar en mi persona en ese momento.
Más allá de que, como es sabido, soy compatriota del delantero del equipo millonario, me causa molestia ver la falta de profesionalismo que ataca, hoy por hoy, a muchos medios de comunicación en este país. Esto afecta, enormemente, la imagen del periodista deportivo a quien durante años se ha catalogado como un ser más pasional que racional.
Un deporte como el fútbol, no puede permitir que tenga demostraciones tan claras de discriminaciones por un color de piel.
Por supuesto se debe repudiar, tajantemente, la expresión racista del locutor, pero principalmente se debe exigir una sanción ejemplar con el fin de sentar un precedente importante para evitar que un caso así vuelva a suceder. Un deporte como el fútbol, no puede permitir que tenga demostraciones tan claras de discriminaciones por un color de piel. Aparte no es la primera vez que el periodista demuestra su falta de respeto durante sus transmisiones.
Las cosas, al parecer, se van a solucionar con las disculpas del señor de La Plata y, lamentablemente, vamos a tener que seguir soportando su grosería. El señor Raimundi, va a seguir con sus insultos y nadie va a hacer nada. Lo más triste de todo, es que cuando se presente algún problema en una tribuna popular, todas las miradas van a caer sobre los fanáticos, sin tener en cuenta que la violencia existe incluso en los relatos de un partido de fútbol.
El “negro de mierda”, seguramente, no se siente afectado por las ofensas del relator.
El “negro de mierda”, seguramente, no se siente afectado por las ofensas del relator. Teo es millonario, acaba de jugar un mundial, marca goles con su club y es una de las máximas figuras del fútbol del continente. La “mala onda” que desata el periodista, con sus comentarios al borde de la xenofobia, no le mueve una fibra al ex jugador de Racing.
Estas actuaciones de un personaje como Raimundi, no hacen más que crear una visión errónea de la calidad humana del pueblo argentino. Un pueblo que llevamos en el corazón todos los extranjeros que lo habitamos y que, además, sentimos como nuestro. Un país con personas tan agradables, como la Argentina, no merece estar en boca del mundo entero por las palabras de un locutor que de valores, la verdad, no sabe mucho.