La ley de la atracción
En la mayoría de los casos en que las personas tenemos un problema nos resulta difícil encontrar una salida sencilla y que no implique algún dolor de cabeza. Solemos pasar tiempo pensando en cómo resolver esta situación y, muchas veces, llega a ser una obsesión que termina en daños superiores como stres, nerviosismo, malestar. Frente a esto, “La Ley de la atracción” nos propone una escapatoria diferente a lo convencional.
En líneas generales, esta ley explica que “somos el resultado de todo lo que pensamos”. O sea que nuestros pensamientos tienen un lugar primordial y por ende, cada cosa que nos pasa es el reflejo de ellos.
Entonces, el consejo es: cuando tenemos un problema, debemos relajarnos y visualizar una solución que nos conforme. Pero, si nos focalizamos en el conflicto y no tenemos pensamientos positivos, el universo nos dará la razón y finalmente, se ampliará nuestra problemática.
¿Cualquiera puede llevar utilizar estos cánones? La respuesta es afirmativa, siempre y cuando estemos totalmente convencidos de ello y lo anhelemos con pasión. Para la Ley de la atracción, no hay imposibles, ya sea desde algo mínimo como aprobar un examen hasta la cura para una enfermedad. “Todo está en la mente”, dicen sus representantes.
No es raro encontrarse con críticas hacia éstas reflexiones e incluso, muchos opinan que es sólo una moda. Ahora bien, ¿No sería más sencillo superar los pormenores inevitables de la vida cotidiana, sólo a través del pensamiento? ¿No estaríamos más tranquilos, y por ende, con más salud?
Ésta “filosofía de vida” nació hace cientos de años. Sin embargo, se hizo masivamente conocida poco tiempo atrás, a partir de un documental, que luego fue editado en un libro. Ambos titulados El secreto.
Actualmente, los autores de “El Secreto” tienen una página: www.thesecret.tv. En la misma, no sólo se explica el funcionamiento de su teoría sino que además permite a los usuarios contar sus experiencias personales con “la ley de la atracción”.