Haciendo equilibrio en la quinta copa de champán
En este breve e intenso relato, conocerás otra cara de ese «sabroso y seductor espumante», una que tiene mucho que ver con lo fantástico (aunque también con lo poético). Que lo disfrutes. ¡Salud!
En este breve e intenso relato, conocerás otra cara de ese «sabroso y seductor espumante», una que tiene mucho que ver con lo fantástico (aunque también con lo poético). Que lo disfrutes. ¡Salud!
El teatro es un mundo, pero el mundo también es un teatro. En este breve e intenso relato, Ce Smile te invita a que visualices una obra en la que la protagonista es, sin duda, la escritura.
«El problema no es ser diferente, sino que, como sociedad, aún no hemos aprendido verdaderamente a aceptar e integrar lo distinto. Hay mucho trabajo por hacer por la integración en todos sus niveles».
«Nada es mejor o peor, simplemente es distinto, y de seguro seguirá cambiando. Pero lo que sí considero importante es no perder de vista la idea de que, a veces, las cosas sí tienen su proceso o evolución, y por algo es de ese modo: por ejemplo, un embarazo tarda nueve meses».
«Si es tan beneficioso y ayuda a eliminar lo negativo de la mente y el cuerpo, entonces, ¿por qué nos resistimos a llorar?»
«Claramente, la dificultad depende de la subjetividad; tiene que ver con la historia de vida, las fortalezas y debilidades, y puede relacionarse también con nuestros temores».
«Llegó la pandemia del COVID-19 y puso de manifiesto (y, por qué no decirlo, también impuso) cambios en el estilo de vida de cada uno de nosotros, tanto a nivel personal como social. Fueron muchos estos cambios, pero uno de ellos, dado como consecuencia del distanciamiento social y de tener que hacer colas para ingresar a cualquier comercio, fue aprender (o, mejor dicho, ‘reaprender’) sobre los tiempos de espera».
«La única forma de recorrer la casa era nadando. Nunca fui muy atlética, por lo cual comencé a desplazarme con la gracia que las escasas clases de natación tomadas en mi infancia me permitieron. Aunque debo confesar que lo que me movía verdaderamente era la curiosidad».